La Tribuna de Toledo
Su nombre es Youssef. Tiene 9 años, aunque dentro de poco, el 30 de diciembre, cumplirá los 10. Estudia 3º de Educación Primaria en el colegio ‘Pedro Melendo García’ de la localidad toledana de Olías del Rey. Es uno de los niños y niñas de la provincia de Toledo que afrontan el nuevo curso escolar con el apoyo de la Organización Nacional de Ciegos Españoles, ONCE.
Youssef no es ciego, pero tiene problemas de visión que le hacen precisar de ayuda especializada para que su educación esté normalizada dentro de las aulas. Y lo ha conseguido, con el apoyo de uno de los maestros itinerantes de la ONCE.
Santos Martínez, acude al colegio de Youssef dos días a la semana. Pertenece al equipo educativo específico de Toledo para atender a alumnos con deficiencia visual o ceguera: «los maestros nos repartimos y vamos a atender a los chavales al centro en el que están escolarizados y de esa manera no se les saca de su entorno y reciben la intervención educativa».
Con Youssef comenzó a trabajar el año pasado. Según explica Martínez, este joven marroquí tiene una deficiencia visual que le limita la visión periférica y para que esta enfermedad no sea un freno para su integración en el colegio y en una educación reglada como el resto de niños y niñas de su edad, se le ha confeccionado un plan de trabajo individualizado, acorde con su problemática.
En la actualidad se está reforzando la lectoescritura (la capacidad que todos tenemos para leer y escribir). Todo el trabajo que Martínez desarrolla en el centro con Youssef viene respaldado por un equipo de profesionales de la ONCE, entre los que se encuentran un instructor de nuevas tecnologías, que acerca a los menores a los ordenadores; un psicólogo, un trabajador social, un terapeuta de rehabilitación y un animador sociocultural.
Lo que este menor recibe es «un enfoque multiprofesional que se conjuga con los profesionales que están dentro del propio centro educativo donde se encuentra escolarizado». Es una colaboración de todos, para un fin común: la normalización de estos niños y niñas con deficiencias visuales o ceguera en su día a día escolar.
Youssef tiene problemas a la hora de establecer una fijación visual, a la hora de hacer un seguimiento de líneas y también explorar visualmente. Estos tres contenidos que indica Martínez se trabajan en la lectoescritura .
En el primer ciclo de Primaria se inicia el aprendizaje de la lectoescritura de forma sistemática, y «nos interesa a nivel visual reforzar el aprendizaje, porque él tiene omisiones, omite grafemas, junta palabras, y todo eso a nivel visual se va trabajando».
En el año que lleva trabajando a su lado, Martínez ha observado muchas mejorías: «es un chaval muy despierto», afirma, «sabe muy bien que se empieza a escribir por la izquierda y sigue la línea y sabe hacer el cambio de línea». En cuanto a la fijación, cuando procede a la lectura de un texto, «de una frase él solo ve dos palabras en la zona central y va estableciendo fijaciones a su ritmo. Va haciendo una lectura más lenta, pero comprensiva».
Aunque el movimiento de los ojos de este niño es más lento que el de los demás, no afecta en nada a sus estudios. Está completamente integrado y «sigue la misma programación que los chicos que hay en su clase. No tiene una adaptación curricular. Las únicas adaptaciones que se pueden hacer con él son adaptaciones de acceso», explica Martínez.
En esta línea, para evitar que la postura frente al pupitre afecte a su espalda, se le ha colocado un atril, para corregir su posición a la hora de leer y escribir, un aspecto que ha mejorado en los últimos meses. Incluso sin el atril, su postura frente a la mesa y el cuaderno o el libro, son menos arqueada que cuando Martínez comenzó a trabajar con él. Con este método tan sencillo se le permite «seguir el currículum que le corresponde por su edad». Por el momento, Youssef no tiene la necesidad de aprender la escritura en Braille. Él utiliza un código de escritura en tinta, ya que su deficiencia, por el momento, le permite tener una visión central, «a no ser que avance la enfermedad, porque puede llegar a ser degenerativa», señala su maestro.
Además de trabajar codo con codo con el profesorado del centro educativo de Olías del Rey, Martínez ha enseñado algunos trucos a la familia de Youssef. Este niño padece fotofobia por las mañanas, por lo cual se ha aconsejado a sus familia que acondicionen la zona donde se encuentra de manera paulatina, durante 15 ó 20 minutos, manteniendo las ventanas cerradas hasta que se adapte, para que la luz no le deslumbre. Además, es bueno para él realizar las actividades escolares con una luz de las denominadas frías, de bajo consumo «por que no le fatiga tanto su visión».
Una de las curiosidades de esta historia, es que para introducir al menor en los textos se escogían recortes de prensa relacionados con el fútbol. Y es que a Youssef le gusta mucho, porque se manifiesta del Real Madrid. De las actividades que realiza en el colegio lo que más le apasiona es la Educación Física «me gusta correr mucho». Del resto de materia, se decanta por la Lengua. Él también ha notado que desde que es asesorado por Santos Martínez ha mejorado mucho a la hora de escribir y leer: «ahora hago la letra más pequeña» y lee «más rápido». Sentado en la primera fila de su clase de 3ºA, Youssef es atento a lo que le enseñan sus profesores, algo que repercute en sus notas, sobre las que dice que van «bien».
Cargando
domingo, 28 de septiembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario